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Herramientas legales para afrontar la insolvencia empresarial: Comparativa entre la Ley 1116 de 2006 y la Ley 2437 de 2024

La insolvencia empresarial puede ser un desafío crítico, pero con el marco legal adecuado, las empresas pueden encontrar soluciones viables para salir adelante.

En Colombia, la Ley 1116 de 2006 estableció las bases para la reorganización y liquidación de empresas en crisis. Ahora, con la llegada de la Ley 2437 de 2024, se han implementado medidas más flexibles y modernas que facilitan la recuperación empresarial.

En este artículo, analizaremos ambas leyes y cómo impactan a las empresas y acreedores.

Ley 1116 de 2006: Fundamentos del régimen de insolvencia empresarial

La Ley 1116 de 2006 estableció un marco sólido para gestionar la insolvencia empresarial con el objetivo de proteger el crédito y permitir la continuidad de las empresas viables.

Principales procesos:

  • Reorganización empresarial: Facilita la reestructuración de pasivos y operación para evitar la liquidación.
  • Liquidación judicial: Distribución ordenada de activos cuando la continuidad del negocio no es viable.

Además, la Superintendencia de Sociedades actúa como juez del concurso, garantizando la transparencia de los procesos.

Si bien esta ley ha sido fundamental, las dinámicas empresariales han evolucionado. Aquí es donde entra en juego la Ley 2437 de 2024 con un enfoque más ágil y digitalizado.

Ley 2437 de 2024: Innovaciones permanentes para una nueva era empresarial

La Ley 2437 de 2024 introduce mejoras que modernizan el proceso de insolvencia y brindan mayor flexibilidad a las empresas.

Principales avances:

  • Procesos expeditos: Reorganizaciones abreviadas para PyMEs con activos menores a 5,000 SMMLV.
  • Financiación orientada a la recuperación: Facilita el uso de activos como garantías y permite acuerdos previos a la liquidación.
  • Digitalización y tecnología: Implementación de herramientas digitales e inteligencia artificial para agilizar los procesos.
  • Levantamiento de embargos: Permite desbloquear recursos financieros desde la aceptación de la reorganización.

Con estas innovaciones, las empresas cuentan con nuevas oportunidades para salir de la insolvencia. Pero, ¿cómo se comparan ambas leyes en la práctica? Veamos sus principales diferencias.

Principales diferencias entre ambas leyes para abordar la insolvencia empresarial

Si bien la Ley 2437 aporta avances significativos, también plantea retos. Empresas y acreedores deben estar preparados para negociar de manera estratégica.

Retos y oportunidades para empresas y acreedores

Si bien la nueva ley introduce ventajas clave, también plantea desafíos:

  • Para empresas: Mayor facilidad de acceso a la reorganización, pero exige estrategias claras para evitar la liquidación.
  • Para acreedores: Se requiere una planificación financiera y contractual más sólida ante el levantamiento de embargos.

¿Es suficiente esta evolución? Desde una perspectiva legal, el marco normativo busca equilibrar la protección del crédito y la sostenibilidad empresarial, pero su éxito dependerá de su implementación práctica.

Ahora que conoces los cambios clave, es momento de tomar acción y prepararte para enfrentar la insolvencia de manera estratégica.

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La insolvencia empresarial no significa el fin. Con las herramientas legales adecuadas y una estrategia bien definida, tu empresa puede superar la crisis y recuperar su estabilidad financiera.

Si tu empresa enfrenta dificultades financieras, es el momento de actuar. Descubre cómo podemos brindarte el acompañamiento para superar la insolvencia empresarial.

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